lunes, 2 de mayo de 2011

Maratón de los Monegros BTT


Este sábado se disputó el afamado y temido Maratón de los Monegros en su XI edición, que consta en su versión larga de 119kms y en su versión corta con 66km, caminos de tierra y polvo con un desnivel acumulado de unos 900 metros según el GPS.

Hasta allí nos desplazamos Miguel Sanz y un servidor, Julio Laplaza, con algo de miedo en el cuerpo pues nunca nos habíamos aventurado antes con unas distancias así sobre la bici de montaña.

Una vez allí, nos reunimos con los amigos que habíamos quedado, retiramos dorsales y nos disponemos a darnos el atracón de pasta pertinente a eso de las 11 de la mañana, ya que la carrera arrancaba a las 13.30, con la fresca.

Ya en la calle de salida, nos dispersamos todos y cada uno se coloca donde puede, en mi caso por el medio más ó menos (de unos 2000 participantes) y en el de Miguel, algo más retrasado.
Se da la salida, y... caos total!! La gente que no avanza, una marea de gente que se mete por un lateral retrasándonos a todos de nuevo, gritos, silbidos y empujones, y a la pata coja hasta acanzar unos 300 metros, donde ya puedo echar los pies a los pedales y subir al sillín de una vez.

A partir de ese momento, se activó el mecanismo y se me llevaron los demonios. Comenzó la remontada!!
Por fuera.. por dentro.. por en medio.. por el camino.. por la acera.. enganchándonos los cuadros.. apoyándonos unos en otros.. gritándonos.. pidiendo paso a gritos.. "por la derecha!", "por la izquierda!", "por el medio!". A veces me juntaba con alguno que iba tan loco como yo y a veces alguno se me juntaba a mí e íbamos progresando como podíamos.

Pues así a lo loco fueron pasando los primeros kilómetros, con unas velocidades que rara vez bajaban de los 35 km/h., jugándonos el tipo en cada pasada y comiéndonos todo el polvo y todos los charcos.

Conforme se adentraba en los Monegros, las pistas eran cada vez más peligrosas, la cantidad de polvo era bestial, hasta el punto no de poder ver el camino.
Debo agradecer especialmente el estado de mis pulmones al Quad que se encariñó de mí y que tenía a unos 30 metros por delante mío dando acelerones contínuos, ni pasaba ni dejaba pasar el tío! Y yo venga a gritarle que se apartara, con el pulso por las nubes y la boca abierta de par en par y venga a tragar.. arg!

Pues así las cosas, el terreno se endurecía cada vez más, cada vez quedaba menos gente por pasar y ya me sabía cerca de la zona de cabeza, con un promedio total de 30,4km/h, cuando de repente en el km 28... ZAS!
Lo de siempre!! Sólo podían pasar 2 cosas.. ó bien me pierdo, ó bien pincho, y esta vez.. no me perdí :/

Con una rabia muy grande, bajé de la bici y me dispuse a arreglar el pinchazo, primero con el spray, que no funcionó, después con cámara nueva, pero las manos no iban, no atinaban, me temblaban, los desmontables se me resbalaban, todo el cuerpo se me movía de las pulsaciones y no daba pie con bola. Ahí ya vi que se iban todas mis esperanzas de quizá poder acercarme a los de delante.

Finalmente, logré poner la cámara nueva, "sólo" me costó 10,5 minutos!! Qué desastre :/
Pero bueno, aún quedaba muucha prueba, así que subí de nuevo a la bici y emprendí la marcha de nuevo... durante 8 minutos más y... ZAS! de nuevo :( Bueno, ya hasta la retirada se me estaba pasando por la cabeza, qué mala suerte.

Como estaba a un par de kms del avituallamiento, decidí andar con la rueda en el suelo y que me la arreglaran allí. Bueno, no me la arreglaron, porque iban saturados a tope con los problemas de los participantes, pero me dieron cámaras así que me puso a lo mío, ahora ya más tranquilo.

En estas que salí del avituallamiento y me encontré con mi compi de fatigas Miguel, y decidimos seguir junticos ya hasta el final.
Al pobre le dio un pajarón monumental, probablemente por no parar en los avituallamientos a descansar un poco, y sufrió lo indecible. Fue muy gracioso cuando paramos sobre el km 90, en el último avituallamiento, y se tiró tripa arriba casi en mitad del camino a descansar y recuperar un poco mientras yo le hacía de "aguador" :)

Tras ese breve descanso, parece que recuperó bastante y enfilamos el último tramo, plagado de caminos retorcidos y llenos de polvo, combinados con pistas rápidas y finalmente, un trozo bastante verde para poco después llegar al pueblo y enfilar triunfantes la meta.

Sólo el hecho de terminar tan dura prueba merece un reconocimiento para cualquier valiente que se atreva a meterse en "semejante sembrao". Con deciros que ya nos volvíamos en el coche tras cenar, ducharnos y escuchar el concierto que se dio después, y todavía llegaba gente, a oscuras total, algunos con linternas, otros sin luces... Qué duro es esto, por Dios.

Bueno, una imagen vale más que mil palabras, ahí os lo dejo al "probe Migué".
(no es que esté moreno, no, es la capa de barro que lleva encima!)

Clasis:
1 José Sanchez 03:59:03
...
1064 Miguel Sanz 06:01:09
1065 Julio Laplaza 06:01:10

6 comentarios:

Julio dijo...

Y ahora que me leo.. perdón por la chapa! Si es que me emociono... :)

Unknown dijo...

Gracias por tu ayuda Julio!!!

Walter dijo...

Otro gran reto conseguido por vuestra parte!!!!
Pero...me habeis acojonado, ese mismo infierno me espera a mi el dia 9 de julio.
Me preparare mentalmente mas que fisicamente, jajajajaja!
Ciao!

Pascual IM2010 dijo...

El "Walter de antes era yo".
He firmado con la otra cuanta google.
Escussa!!!

ALFREDO dijo...

MAQUINASS...

Walter dijo...

Enhorabuena campeones, a mi lo de la bici de montaña no me mola mucho, pero el hecho de que sea una prueba dura me anima a apuntarme en otra edición.
Un abrazo
Fdo: Paco V.